Toda la Iglesia está llamada a vivir la cultura de la prevención. El laicado tiene un papel relevante en este sentido. De ahí la importancia de ofrecer distintas herramientas formativas que abonen al tema.
A través de testimonios de víctimas de abuso, reflexiones desde distintas áreas profesionales de América Latina, propuestas para dar seguimiento a denuncias, entre otros elementos y guías, este libro tiene como objetivo fortalecer el apostolado de la prevención.