A través de las palabras interiores del Señor a Gabrielle Bossis, Jesús nos dice que nos ama con locura, con la inmensa ternura de su Corazón enamorado de nosotros, al mismo tiempo que afirma que también tiene sed de nuestro amor, que desea ser consolado por nosotros y que lo tratemos con ternura. Nos pide que seamos sus amigos íntimos y nos asegura que goza de nosotros y que le atrae nuestra debilidad. En estas líneas Jesús nos sorprende al decir que es un mendigo de amor, el huérfano más olvidado de la tierra, y que le duele no ser querido. Afirma incluso que su felicidad aumentaría sabiendo que somos felices, y que su Corazón es muchísimo más sensible que el nuestro a toda manifestación de afecto. Esto es lo más sorprendente, lo que más nos cuesta creer, y sin embargo son los sentimientos de su Corazón. Ojalá que con la meditación de la presente antología de textos del libro Él y yo, el lector pueda conocer mejor cuánto y cómo nos quiere Dios. Este es el camino para, con su Gracia, enamorarnos de Él con la locura de nuestro corazón.