Anselm Grün, que vive de la rica tradición del silencio monacal, nos muestra caminos para alcanzar la quietud, encontrarnos a nosotros mismos y abrirnos a lo que sostiene nuestra vida. Diversos tipos de contemplación y meditación, fáciles de realizar, posibilitan un camino personal hacia la serenidad.
«La quietud es una cualidad que nos hace bien»
(Anselm Grün).
Diversos tipos de contemplación y meditación, fáciles de realizar, posibilitan un camino personal hacia la serenidad. A través del cuerpo, del silencio, la palabra o la música; contemplando la naturaleza, meditando la Escritura, o repitiendo actividades sencillas, vamos alcanzando en nuestras vidas, a menudo intensas, la quietud.
La sola lectura de este libro permite entrever ya algo de lo que es esa quietud: fuerza, plenitud y unión con todo.